Desde la imponente Sagrada Família hasta la brillante fachada rica en texturas de la Casa Batlló, pasando por el maravilloso paisaje del Park Güell, es fácil entender por que Antoni Gaudí (1852-1926) se ganó el epíteto de «el arquitecto de Dios». Con formas fluidas y una precisión matemática, su obra ensalza el milagro de la creación natural: las columnas se elevan como troncos de árboles, los marcos de las ventanas se curvan como las ramas en flor y las baldosas de cerámica brillan como la piel escamosa de los reptiles.
Con esta extraordinaria atención a los detalles naturales, su inspiración en la estetica neogótica y orientalista, y el compromiso de toda una vida con la identidad catalana, Gaudí creó una vertiente única del movimiento modernista que definió el paisaje urbano de Barcelona.
96 páginas.
Dimensiones: 21 cm ancho x 26 cm largo